Lo llevo haciendo años y ha llegado el momento de compartir uno de los secretos mejor guardados, ¿por qué está tan bueno? ¿por qué no hay bizcocho casero igual?, por el aceite de oliva virgen y la manzana!!
La diferencia de usar aceite de oliva y girasol es abismal, por la consistencia, por la intensidad del bizcocho que en ningún momento sabe a aceite pero nadie sabe explicar el regusto que deja. Y además la manzana ayuda a que esté muy jugoso y con un toque de sabor, no llega a saborearse la manzana.
El vasito de yogur nos puede servir como medida para los ingredientes. El molde es de 24 cm. de diámetro, con un agujero en medio y desmontable.
- 3 huevos
- 200 gr. azúcar (dos vasitos de yogur)
- 100 ml. aceite de oliva virgen (un vasito de yogur)
- 170 gr. harina (3 vasitos de yogur)
- 1 yogur de limón (yo casi siempre uso un yogur blanco y raspadura de limón)
- 1 sobre de levadura en polvo
- Un pellizco de sal
- Una o dos manzanas (opcional, ¡¡pero ya no será mi bizcocho, ni estará tan bueno!!)
- Unas cuantas nueces y una cucharada de azúcar moreno(opcional)
- Un poco de mantequilla para engrasar el molde
Podemos hacer la masa con la Thermomix, en el vaso de la batidora o con una varillas de mano. Y por supuesto, necesitamos un molde con agujero en el centro, por la sencilla razón de que es un bizcocho que crece mucho, y si no tuviera agujero, para que se hiciera por el centro se quemaría por los lados.
1. Mezclamos los huevos con el azúcar, hasta que esté totalmente integrada.
TMX 1 minuto, vel 3, temp. 50º.
2. Añadimos el aceite y el yogur (y en su caso la raspadura de piel de limón), y mezclamos bien.
TMX 15 segundos, vel 3.
3. Añadimos la harina, la sal y la levadura, y mezclamos hasta que la masa sea uniforme (no es nada difícil).
TMX 6 segundos, vel 3.
4. Pelamos y picamos pequeñita la manzana, podemos dejar la mitad de una para laminarla y decorar la superficie del bizcocho. Mezclamos los trocitos de manzana con la masa pero ya sin la batidora, con una espátula o cuchara.
Untamos el molde mantequilla y espolvoreamos con harina (evitaremos que se pegue), en la base echo unas pocas nueces picadas y un poquito de azúcar moreno, que después en el horno carameliza y le da un toque estupendo
5. Horneamos en el horno precalentado a 180 grados entre 30 y 40 minutos, cuando se cumplan los 30 minutos pinchamos con un cuchillo y si sale limpio está listo, sino, lo dejamos unos minutos más.