Brocoli gratinado con jamón y ajillo

El brocoli es una verdura que me gusta mucho, me gusta comerlo "al dente", es decir, hervido al punto de que aún cruja cuando se come. Pero a veces hay que buscar otras formas de cocinar las verduras para que les gusten a todos y resulten sabrosas.

Ésta receta ha sido un éxito.  El secreto... la bechamel con jamón serrano y ajillos machacados (imperceptibles). Una vez gratinados han quedado de lujo, es una satisfacción grande ver como un plato de verduras se come con tantas ganas y no quedan ni rastro en el plato!!



  • Brocoli (un cogollo entero, aunque en las tiendas ya lo venden cortado y listo para cocinar)
  • Taquitos de jamón serrano, unos 100 gr., un paquetito (yo  compro taquitos-minis)
  • 3 o 4 dientes de ajo pelados
  • Una cucharada de aceite de oliva
  • Una cucharada de harina
  • Leche (no más de un vaso, lo que vaya pidiendo la bechamel)
  • Queso rallado, y si tenemos un trozo de queso (para la bechamel)


Ponemos a hervir una olla con agua, y hervimos el brocoli ya cortado entre 5 y 10 minutos, metemos en agua fría (para que conserve el color verde) y dejamos escurrir.

Machacamos los ajos en un mortero (o lo picamos muy chiquito), en la sartén añadimos una cucharada aceite de oliva y a fuego medio sofreímos los ajillos y los taquitos de jamón (si los tacos son grandecitos los picamos más, incluso queda bien pasado por una picadora). No hay que dejar ni siquiera que los ajos se doren.

Añadimos la cucharada de harina y mezclamos bien, y una vez que la harina desaparezca, vamos añadiendo la leche, echamos un poco y movemos hasta que se integre, y así chorrito a chorrito hasta que tenga la textura de una crema ligera, añadimos un poco de queso y mezclamos hasta que sea uniforme.

Colocamos el brocoli en una fuente de horno y cubrimos con la bechamel, espolvoreamos con queso rallado. Horneamos unos 10 minutos a 200 grados, hasta que se dore (en el último momento podemos darle unos minutos de grill).

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