Berenjenas con miel

  • Una berenjena
  • Agua
  • Sal
  • Harina
  • Aceite para freír

Cortamos en lonchas finas (también podemos hacerlo en tronquitos o como nos guste). Las sumergimos en agua por lo menos media hora, cambiamos el agua al menos una vez. (Las berenjenas sueltan el amargor, y el agua se oscurece).

Pasamos por harina, por montocitos tanto para enharinar como para freír, para que no se haga una plasta. Freímos hasta que estén doradas por ambos lados, escurrimos en papel absorbente.

Servimos con miel de caña.

Meriendas caseras para una tarde de domingo....

Los domingos por la tarde siempre los he sentido como espacios para poder hacer lo que me apetece, es el último suspiro de la semana cuando ...